A muchos de vosotros, el «Cenacolo Vinciano» no os dirá nada pero si hablamos de «La última cena» seguro que sabéis de lo que estamos hablando. Es una de las pinturas más famosas del mundo. Fue pintada por Leonardo Da Vinci en una de las paredes de la iglesia convento de Santa Maria delle Grazie en Milán. Está pintada con temperas y óleo sobre yeso seco por lo que tendrás que escaparte a Milán para disfrutar de esta maravilla.
Hemos visto el Cenacolo Vinciano en miles de ocasiones. Es una de las pinturas más famosas del Mundo. Alcanzó su máxima popularidad por el libro de «El código Da Vinci» de Dan Brown. Está lleno de misterios y de teorías que lo hacen muy atractivo para historiadores y curiosos como nosotros.
Somos grandes admiradores de la obra de Leonardo Da Vinci y cuando planificamos nuestra ruta por Italia teníamos claro que queríamos visitar el Cenacolo Vinciano. Intentamos comprar la entrada por Internet a través de la web oficial pero todos los horarios de tiempo que pasábamos en Milán estaban bloqueados. Habíamos leído que las entradas se agotaban enseguida y que había que planificar la visita con bastante antelación. Te recomendamos que intentes comprar la entrada con antelación desde la página oficial pero, si no lo consigues sigue leyendo.
Conseguir entrada para el Cenacolo Vinciano
Si has intentado comprar tu entrada con antelación a través de la web y no lo has conseguido, no te des por vencido. Nosotros estuvimos pendientes de la web durante bastante tiempo pero nos fue imposible reservar nuestra visita al Cenacolo Vinciano.
Cuando llegamos a Milán decidimos acercarnos al convento Santa Maria delle Grazie, donde se encuentra la pintura, para intentar por última vez comprar la entrada. Por lo que habíamos leído en internet no teníamos muchas esperanzas pero, sorpresa! Pudimos comprar entradas en la taquilla para la tarde de ese mismo día. Pagamos 10 euros por cada entrada y nos fuimos a conocer más de Milán hasta la hora que nos habían dado.
tra de las formas de conseguir entrada para visitar La última cena era usar el teléfono del call center que aparece en la web oficial. Puedes pedir hablar en inglés. No todas las entradas salen a la venta en la web.
Visita a La última cena de Leonardo Da Vinci
Nos presentamos en la iglesia de Santa Maria delle Grazie a la hora de nuestra visita. Somos 30 personas. Antes de entrar en la sala donde se encuentra La última cena nos explican las normas. Se ruega silencio para que todos podamos disfrutar de la pintura con tranquilidad.
El Cenacolo Vinciano ocupa una pared de una pequeña habitación con atmósfera controlada. Nos avisan de que no podemos estár más de 15 minutos en la sala. Es una visita express que para nosotros mereció mucho la pena. La pintura no defrauda y emociona estar en la misma sala donde estuvo Da Vinci trabajando tanto tiempo.
Lo que más me sorprendió del lugar fue que en la pared de enfrente hay un fresco del que nunca habíamos oído hablar y que también es espectacular. Es la Crucifixión y fue pintado por Giovanni Donato da Montorfano en la misma época que Leonardo Da Vinci pintaba La última cena al otro lado.
La visita al Cenacolo Vinciano es uno de los imprescindibles en una escapada a Milán. No te pierdas visitar un lugar único como este!
¡Qué suerte la vuestra! En nuestra visita a Milán, hace ya 10 años, no pudimos conseguir entrada por internet, nos acercamos de todas maneras pero allí tampoco hubo suerte. Tendremos que volver a ir 🙂
Pues sí que tuvimos suerte! Hicisteis muy bien en pasar igualmente porque nunca se sabe como en nuestro caso. Si lo intentasteis es que os hacía la misma ilusión que a nosotros así que hay que volver 😉 Milán es puerta de acceso a muchos viajes chulos por el norte de Italia y seguro que volvéis y tenéis la misma suerte que nosotros.