En nuestro viaje a Dublín reservamos tiempo para la visita a Trinity College. Para muchos, esta es una visita imprescindible en la capital de Irlanda pero para otros, pagar la entrada para ver el libro de Kells y la Old Library no merece la pena. A continuación, te contamos todo lo que aprendimos con nuestra experiencia.
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¿Qué es Trinity College?
Trinity College es un campus perteneciente a la Universidad de Dublín. Estudiar en el Trinity tiene prestigio mundial y puede compararse en su medida con Cambridge u Oxford en Inglaterra.
¿Dónde está Trinity College?
Trinity College está en pleno centro de Dublín y es visita obligada si vas a viajar a la capital de Irlanda. El recinto es enorme. Sorprende encontrar un campus universitario tan grande en el centro de una ciudad. Esto hace que las calles del centro estén llenas de gente joven, estudiantes que estudian e incluso viven en el propio campus, y es algo que nos encantó de la ciudad. Está genial que en Dublín se mantenga un campus tan grande en el centro ya que normalmente el ambiente universitario se concentra en otras zonas de las ciudades.
Si vas a visitar Dublín no será difícil encontrarlo ya que se encuentra muy cerca del río Liffey en la parte sur. Enfrente del Green College, el nombre del recinto, se encuentra lo que antes era el Parlamento que ahora es el Banco de Irlanda.
¿Cómo hacer una visita a Trinity College?
La entrada al recinto, Green College, es libre. Puedes ver el campanario que es, seguramente, la parte más fotografiada de la Universidad. Se utiliza como punto de encuentro para estudiantes y no estudiantes. Nosotros hicimos un free tour por el sur de la ciudad que partió de aquí. Es un lugar de tránsito constante de personas y con alguna que otra leyenda… Dicen que todo estudiante que suba al campanario y toque la campana tiene derecho a convertirse en rector. Eso sí, el despacho del rector está justo en frente y se cuenta que tiene una ballesta para evitar que le quiten el puesto.
A los dos lados del campanario se encuentra lo que se conoce como «el cielo» y «el infierno». Son dos edificios muy similares que se conocen por ese nombre porque uno de ellos es la capilla y el otro es donde se hacían los exámenes más importantes. ¿Adivináis cuál es cuál? 😉
El edificio de la Old Library da a esta misma plaza aunque la entrada se encuentre al otro lado. Aquí se encuentra el libro de Kells que contiene los 4 evangelios y tiene más de 1000 años. Todo esto salvo este último edificio tiene entrada libre. Para visitar la Old Library y el libro de Kells hay que pagar entrada. Es una entrada única para ambas cosas.
Entradas para ver el Libro de Kells y la Old Library
El aforo está limitado y las entradas se compran por franjas horarias. Al comprar entradas en la web hay que elegir la hora que queremos hacer la vista. Por eso es importante comprar la entrada con antelación si no disponéis de flexibilidad en el horario o si vas en temporada alta. Cuestan entre 11€ y 14€ dependiendo del horario y fechas.
Nosotros no nos decidimos a entrar hasta el último momento. Nos habían dicho que los estudiantes del Trinity tienen el acceso libre y pueden entrar gratis con un acompañante. Justo en frente del acceso a la antigua biblioteca hay una cafetería y dicen que si invitas a una pinta a alguien puedes llegar a un acuerdo para ahorrarte la entrada. Nosotros no lo intentamos pero ahí lo dejo… 😉
Cuando empezó a formarse la cola para comprar entradas decidimos comprarla por internet ahí mismo a través del móvil. Así nos tocaba hacer la cola más rápida. Luego, paseando por el edificio que está justo en frente del acceso, dimos con unas máquinas donde también se pueden comprar y ganar tiempo si no dispones de internet.
¿Merece la pena la visita a Trinity College?
Sin duda, Green College es visita obligatoria en cualquier escapada a Dublín. Pasear por el campus lleno de estudiantes, ver el campanario, el cielo y el infierno, descubrir la escultura Sphere with sphere… pero si hablamos de visitar la Old Library y el libro de Kells mi opinión varía un poco.
Esto, como todo, depende de las inquietudes y curiosidad que tenga cada uno. Es verdad que tanto el libro de Kells como la Old library son una joya y su belleza es indiscutible pero creo que la visita no merece los 12€ que pagamos por ella. No fue más de una hora la que estuvimos dentro. Se acercaría a la media hora y es que hay tanta gente en un espacio tan reducido que no puedes disfrutar de la exposición.
La exposición de la planta baja está diseñada tan mal que es imposible leer la información que se ofrece porque está lleno de gente. La parte donde se encuentra el libro de Kells, obviamente, es la más solicitada y cuando consigues llegar al expositor tienes a gente detrás tuyo esperando a que avances.
La planta de arriba la ocupa lo que se conoce como The long room, como he dicho antes, es una verdadera joya. Eso sí, llenísima de gente sin parar de echar fotos. Salvo la copia de la de la proclamación de la Republica de Irlanda y el arpa del siglo XV que es el emblema del país, no hay nada más en exposición. Los libros de los estantes no pueden explorarse y únicamente está abierto al visitante el pasillo central.
Es muy fácil decir que merece o no la pena un lugar cuando ya se ha estado ya que cada uno tiene sus propios gustos. Decidid vosotros mismos 😉